Hoy: El empresario testimonial

En esta serie de ensayos orientadores sobre distintos sujetos y situaciones que parecen ser pero no son hoy nos enfrentamos a un fenómeno de nuestro tiempo. Producto de la globalización, el exitismo menemista, la ambición desmedida e Internet, pulula entre nosotros el EMPRESARIO TESTIMONIAL. Este sujeto, de andar rápido, siempre con el blackberry en la mano y trajes de importantes marcas tiene una característica básica para ser reconocido: ES EMPRESARIO PERO NUNCA SE SABE DE QUÉ (del transporte, del carbón, de las hamburguesas, de los taxímetros?). El enigma sobre la actividad productiva a la que dedica sus horas no hace sino aumentar su atractivo entre las mujeres y metrosexuales que lo rodean. La segunda característica del empresario testimonial es la siguiente: NO TIENE SEDE, EMPRESA FÍSICA NI OFICINA PERO TIENE UN AUTO DE LA CONCHA DE SU MADRE. Va y viene con sus aparatejos tecnológicos (notebook, netbook, blackberry, afeitadora eléctrica y minipimer) y sus lugares de "negocios", "meetings", "breakfast" "the pencil is on the table" son siempre bares y restaurantes muy muy conchetos. La tercera característica de este paradigma de los personajes testimoniales (junto con el novio testimonial es de lo más top en el ranking), la cual por ser tercera no debe ser menospreciada es de neto carácter tributario: el empresario testimonial ES MONOTRIBUTISTA CATEGORÍA A Y NO ESTÁ AL DÍA CON EL PAGO. La cuarta característica distintiva es que SIEMPRE ESTÁN PROYECTANDO NEGOCIOS FABULOSOS que tienen que ver con países extranjeros, viajes, empresas multinacionales y mucho mucho ruido. Básicamente podemos decir que el empresario testimonial puede ser muy nocivo si viene acompañado de lazos afectivos o de sangre. noviazgo, matrimonio o como hijo -suele ser uno de los casos más nocivos-. Ahora bien, el empresario testimonial puede ser un buen amigo (nunca prestarle un sope), tolerante vecino y sobre todo se desempeña muy bien como "conocido de bar o de la noche" (esos que te pegan un saludo desde la última mesa apenas te ven entrar). Las chicas de los martes te recomendamos que si reconocés en tu entorno un empresario testimonial, inmediatamente informes a la AFIP y ni se te ocurra curtirteló.