Consultorio sentimental para machos rosarinos

Cacho: Antes que nada hola, campeón, ¿cómo estás? Te sigo siempre y aunque nunca pensé que iba a necesitar de tu ayuda hoy te pido un consejo. Tengo 38 años, soy empresario, me dedico al rubro inmobiliario y la verdad es que me va bastante bien. Además, no tengo mucha pinta pero con las minas me defiendo perfecto con "el amigo", no sé si me entendés (salí a mi viejo, tengo una tarasca que asusta, parezco un actor porno negro) Hace más de seis meses que estoy atrás de una mina. Ella es muy conocida, modelo, vedette, 23 años, un lomo infernal y aunque parece bastante rapidonga a mi me estuvo costando. Ya le regalé un auto importado, un departamento, le monté una obra de teatro y le pagué tres viajes (viajó sola, no conmigo). Me dijo que está decidida a hacerme pasar un día impresionante, inolvidable. Por lo que entiendo que está por entregar lo que ya le dio a tanta gente, no? Ahí está mi duda, Cacho. Me invitó al Hotel H.J. de Pilar el domingo 27 de junio a las 15,30 hs..... podés creer que sea tan hija de puta? ¿Justo a la hora de partido tiene que ser? Todavía no le dije nada, pero no sé que hacer. Llevo gastado más de U$s200.000 en esta mina y justo cuando me la puedo coger juega Argentina en octavos de final. No sé qué hacer. ¿Vos que harías? Marcos.

BlackBerry® de Personal, tu mundo en tus manos.

Querido Marcos:

¡Qué dilema ético! Te comento que desde la antigüedad el hombre siempre estuvo entre entre el ser y el deber, entre el deseo y el deber. Desde antaño la filosofía ha analizado largamente esta problemática. Hoy vos tenés el gran problema de darle bola a tu deseo (ver el partido) o a tu deber (cogértela, como todo macho rosarino). La gran inversión que realizaste tiene que ser recuperada y te merecés una ganancia, de eso no hay dudas. Vos que sos empresario sabrás que la inversión a veces no se recupera de un día para el otro y para llegar a ganar hay que saber esperar. Otro punto del análisis es establecer las prioridades de un macho nacido a la vera del Paraná: primero la selección, después tu equipo de fútbol local, luego los amigos y por último el movimiento (como decía el General). O sea: por último el polvo, que es lo más importante del mundo, pero igualmente antes del movimiento tenés que ver tus partidos y estar con los muchachos. Así las cosas, te digo lo que haría. Como buen macho antes que nada le apago el celular o blackberry, y corto el télefono fijo aproximadante desde el partido Uruguay-Corea. No se te ocurra ser tan boludo de aparecer en el messenger! Finalizado no sólo el partido de Argentina, sino los eventuales y casi seguros festejos, bebida hasta la última gota de alcochol con los amigos y habiendo descansado gratamente, llamás a la señorita en cuestión y le decis que te SECUESTRARON pero que te soltaron porque no tenían a quien pedirle rescate. Si no te cree insistí y si se va es porque nunca ha sido tuya (como dijo Sting). Y además, si después de tanta pompa te das cuenta que la minita es un bajón, quedate tranquilo que siempre estás a tiempo de tomarte el buque e irte a la mierda. Suerte amigo.

Cacho.

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