jueves, 4 de octubre de 2007

CRISMORENIZACIÓN Y BIOÉTICA (de Gabriela Gervasoni)


Desde fines de los ochenta la ciencia se ha enfrentado a un nuevo fenómeno. En sus comienzos estudiado por la sociología, fue en definitiva la medicina la ciencia que le dio el nombre con el cual hoy lo conocemos: CRISMORENIZACIÓN.-
En el presente trabajo, pretendemos dar un primer acercamiento al tema, a fin de que el profano comprenda sus notas distintivas y sea capaz de identificarlo para proceder (en su caso) a tomar las medidas correspondientes.-

CONCEPTUALIZACIÓN.-
Llamamos CRISMORENIZACIÓN al fenómeno que presentan las mujeres de más de treinta (30) años de edad, consistente en “...la obstinación psicofísica en permanecer en una eterna adolescencia, exteriorizada en la utilización de recursos artificiales y artificiosos para aparentar la perenne juventud de cuerpo y espíritu...” [1].-
El término CRISMORENIZACIÓN refiere a la primer mujer que manifestó el fenómeno, y que ha quedado como prototipo de estudio, dado que jamás se ha conocido un caso de la envergadura del suyo, y porque posteriormente su estética fue imitada por las nuevas exponentes del movimiento.-
Debemos destacar que sólo las mujeres son capaces de realizar CRISMORENIZACIÓN. Algunos homosexuales hombres han sido estudiados como supuestos exponentes en este tema, pero los casos no dieron con el tipo en estudio: se trató sólo de intentos infructuosos[2].-

CARACTERÍSTICAS FÍSICAS.-
En cuantos a las características físicas probadas de las mujeres que padecen CRISMORENIZACIÓN, podemos enumerar las siguientes:
1) DELGADEZ/FLACCIDEZ: Las mujeres estudiadas están todas por debajo de su peso ideal (en general entre ocho y diez kilogramos). El descenso brusco de peso se logra de manera diferente en cada caso: bulimia, anorexia, pastillas, gimnasia brusca, inanición, etc. Al lado del escaso peso, las CRISMORENIZADAS presentan flaccidez en los brazos (sobre todo en la parte interior), abdomen, pechos, glúteos y en casi todos los sitios en que podría haber músculos.-
La celulitis es un fenómeno singular, dado que empieza a aparecer alrededor de los veinticinco años y produce una metástasis total e irreversible al llegar a los treinta. Las crismorenizadas han sido capaces de experimentar las terapias más heterodoxas en su lucha tenaz contra esta plaga. Tanto es así que por ejemplo, MARIANA TORRALBA [3] fue sometida en el Instituto Balseiro a una crionización nuclear, tratamiento que le quitó el habla durante seis meses, pero logró su cometido, ya que con sus largos 32 años, la susodicha permanece libre de celulitis [4].-
2) RUBIOR/REFLEJOR/LARGOR: Generalmente, la CRISMORENIZACIÓN lleva a las mujeres a llevar el cabello muy rubio, con excesivos reflejos clarísimos, opaco (casi sin vida), largo hasta la cintura, y a veces sujeto con pequeñas hebillitas de colores. No se han observado calidades específicas en cuanto a rulor o lacior, ya que es independiente del fenómeno. Muy interesante es el tema del flequillo y los desflecados, utilizados para cubrir el rostro durante gran parte del día.-
Los injertos o extensiones están a la orden del día. Una crismorenizada de espaldas puede ser confundida con cualquier virgen adolescente, en gran parte por el efecto del largor y las hebillas. Está de más decir que cuando la crismorenizada gira y el rostro choca con el del observador la confusión da lugar a una realidad dura y triste [5].-
3) VESTUARIO/ACCESORIOS: En cuanto al vestuario de las crismorenizadas, ha ido variando (siguiendo los giros de la moda) desde la década del ochenta a esta parte. Distinguiremos tres etapas con sus vestuarios característicos:
3.1- Década del ochenta: Las mujeres estudiadas utilizaban muy corrientemente:
× Pantalones nevados (negros y azules).-
× Botas texanas.-
× Camisolas amplias sujetas con cintos de gran anchor.-
× Minúsculas minifaldas “al pelo” [6].-
× Toreritas bordadas de diferentes telas.-
× Vinchas o peinetas soportando enormes y rigidos jopos frontales.-
3.2- Década del noventa: En esta época, las crismorenizadas se caracterizaban por vestir:
× Jeans ajustadísimos, desvirgadores y deformadores de asentaderas.-
× Remeras ajustadas de escotes diversos.-
× Calzas y/o ciclistas de lycra ensanchadores de cadera (también deformadores de culo) acompañados de swetters y/o buzos de largor superior al calza o ciclista.-
× Jardineros de jean deformadores de abdomen y de busto.-
3.3- Años 2000/2002: Las mujeres estudiadas tienen en su ajuar:
× Pantalones pescadores, corsario y cargo.-
× Camperas de jean de azules varios.-
× Volado, volado y más volado.-
× Corpiños push up y recontra push up, con arcos de acero y bases de hormigón armado.-
× Medias reductoras forradas con material ortopédico.-
4) CIRUGÍAS/ESTIRAMIENTOS: Unos de los rasgos distintivos de la crismorenizada es la rigidez de sus gestos y movimientos. Como consecuencia de las innumerables cirugías a las que se someten las mujeres en estudio, sus sonrisas tienen una rigidez muy característica: ríen como si les estuvieran metiendo un dedo en el culo. Asimismo, cualquier mueca repercute en las orejas, las cuales se mueven al compás de los movimientos de la cara. Los pómulos suelen superan los veinte centímetros de alto, producto de implante de colágeno, hecho que a veces quita algo de visión (muchas veces afectada de antemano debido a lo tirante de las costuras que se hacen detrás de las orejas).-
La mujer que sufre crismorenización es reconocible al tacto, dado que las continuas lipos e injertos hacen que la piel de las tetas parezca el culo, los pómulos se sientan como tetas y la panza sugiera un hueso del codo. En casos muy avanzados el mismo cuello parece un útero (por lo largo y al pedo que está, ya que no sirve para llevar nada encima).-

CARACTERÍSTICAS PSÍQUICAS:
De los innumerables casos de crismorenización estudiados ha surgido un patrón casi exacto de estas mujeres, el cual sintetizaremos infra:
× Personalidad infantil, debilidad de carácter, alegría desmedida, risitas exageradas e injustificadas,.-
× Promiscuidad sexual, obstinación con masculinos irrecuperables y excesivamente jóvenes, multiorgasmiedad, decadencia moral.-
× Apatía política y social.-
× Inclinación por actividades náuticas y deportivas en exceso, salidas infructuosas a lugares equivocados, permanente dicotomía “voy-no voy”, largas estadías en soledad, programas “montañarrusescos” con incontables amigos y desconocidos.-
× Lecturas vacías y frustrantes (Caras, Cosmopolitan, Para Ti, etc.), chateos al pedo, navegación internáutica sin sentido.-
× Fanatismo por “Rebelde Way”, Bandana, Britney (¿?) que no guarda ninguna relación tiempo-espacio.-
× Incorporación de actividades paranormales y esotéricas con finalidades amoriles y de mejoramiento psicofísico, tales como tarot, lectura de la borra de leche, runas, fen shui, etc.-

TRATAMIENTOS ACONSEJADOS:
La O.M.S. aconseja para los casos de crismorenización el tratamiento del D.N.I. Este tratamiento consiste en la búsqueda del documento nacional de identidad de la paciente [7] para enfrentarla al mismo y hacerle sentir la contradicción total entre lo que ella es y lo que el documento dice.-
Asimismo, algunas corrientes de la medicina aconsejan la presencia de un masculino más o menos sano que sea capaz de copular diariamente con la paciente, no habiéndose probado fehacientemente la bondad del tratamiento.-
Otras corrientes afirman que la maternidad es bien tolerada por las crismorenizadas, que al perder el sueño durante los primeros meses del bebé olvidan su pasado infausto y renuevan su facultad de enfrentar con entereza los devastadores efectos de la edad. En algunos casos la maternidad ha sido nociva, dado que en madres de niñas el fenómeno de crismorenización vuelve cuando la hija llega a la pubertad, creando innumerables conflictos para la madre, la hija y el espíritu santo.-

COLOFÓN:
A esta altura del análisis, solo resta recordar las palabras de la pionera, Cris Morena, que alguna vez dijo: “...siempre me sentí una pendeja..y que?????...”.-

[1] GUEVARA, Nacha, Crismorenización asistida; Editorial Astrea, año 1999, Pág. 8.-
[2] Estos intentos fallidos fueron llamados “putificación adolescente” por algunos y “conchificación frustrada” por otros. En relación al tema ver DE LA VEGA, Florencia Putificación y juventud eterna, Editorial Conchéfila, Tomo IV, Págs. 841 y sgtes.-
[3] Mariana Torralba es una reconocida artista ocular, nacida en Rosario el día 01/10/1970. Fue la primer exponente de la Crismorenización en la Cuenca Lechera. Su biógrafa, Soledad Pastorutti, cuenta sus hazañas en el libro “Mariana: de una nube de pedo a la crismorenización”.-
[4] En la Circular Nro. 2233 de S.E.N.A.S.A obra la constancia de “libre aftosa y libre celulitis” de Torralba.-
[5] En estos casos, a más de uno se le ha oído decir “... pero de caruza merluza...”.-
[6] Según otros autores “...montadas a pelo...”.-
[7] Destaquemos que muchas veces este documento es adulterado, escondido en caja fuerte o incluso arrojado al mar por la misma crismorenizada, en patente negación de su edad biológica.-

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